HETERÓNIMO COMO VÍA DE SOCIALIZACIÓN DE LO ÍNTIMO

♡Hernán Kesselman dixit♡

La singularidad del sujeto circula por el grupo. En los grupos con seguridad psicológica, lo íntimo se socializa y deja de ser íntimo, para pasar a ser personal. Lo personal corresponde a la subjetividad grupal y resuena en la intimidad de cada uno. Ésa es la diferencia con el strip tease donde el que se desnuda muestra el cuerpo y el que mira está en la oscuridad: no hay resonancia sino rebote. Ésta es una de las dificultades del Psicodrama Público, no se sabe quiénes son resonadores y quiénes son rebotadores. Lo íntimo exhibido públicamente, sin atravesar por el filtro del grupo, es provocador de la mirada obscena. No hay psicópatas, hay vínculos psicopáticos. No hay obscenidades, hay provocación de la mirada obscena. Al bautizar al heterónimo se lo socializa.

LA CREACIÓN DEL ARTE, por Ricardo E. Rodríguez Ponte(*)

(*) Conferencia brindada en la Escuela Freudiana de Buenos Aires, los días 16, 17 y 18 de Junio de 1988. El texto fue posteriormente publicado en La creación del arte. Incidencias freudianas, Ediciones Nueva Visión, Buenos Aires, 1991.
(...)
¿Cuál es la relación entre psicoanálisis, ciencia y arte? ¿Cómo pensar esta articulación? Si consideramos los tres modos de relación posible -por lo menos, los tres modos que yo conozco- entre psicoanálisis y arte, una vez que hayamos descartado eso que se llama "psicoanálisis aplicado" y que me parece una rama bastarda, que reduce y degrada tanto al psicoanálisis como a aquello a lo que se "aplica" a una trivialidad sin consecuencias, entiendo que hay dos modos de relación que son clásicos. 
Uno es este que dije recién, y no sé si podría mejorar su formulación: "la intuición" de formas generales, algo que a Freud le permitió pasar de la singularidad de una experiencia a una especie de universal conceptualizable y transmisible. Mencioné a Edipo Rey y a Hamlet, y en esta línea tal vez podríamos ubicar todo un costado de la interrogación que Lacan dirige a Joyce, el artista, aunque no se reduzca a eso.

Creo que un segundo modo de relación es el que yo llamaría "la mostración". Pienso, por ejemplo, en el análisis que Freud hace de la Gradiva de Jensen: allí no hace otra cosa que ilustrar sus propias concepciones ?mas allá de las intenciones freudianas de darle al texto un carácter "probatorio", por demás dudoso?, aunque en conjunto dicho análisis se revela retardatario, debido sin duda a los avatares coyunturales de su relación con Jung. También, La carta robada, de Poe: el análisis que hace Lacan de este relato creo que va en ese sentido, aunque el resultado es más interesante, porque si bien no innova, al menos anticipa. También, tal vez, pero lo digo con menos convicción porque ignoro casi todo sobre eso, la importancia que tiene la pintura en los seminarios de Lacan; por ejemplo, y para mencionar sólo dos, la cuestión de la anamorfosis, y lo que resulta del análisis del cuadro de Las Meninas, de Velázquez, en el transcurso de los seminarios 13 y 15, para lo que es la posición del analista.

Paso ahora a lo que en este momento me interesa en relación al arte, en particular la literatura, (1) a lo que podría ser un tercer modo de relación. A saber, que el psicoanálisis es también una tekné, un saber-hacer, al igual que ese decir que es el decir poético. Al respecto, Lacan sugiere, por ejemplo en su seminario L’insu..., estudiar la escritura de la poesía china. No la poesía, su escritura, porque dice que si bien la poesía, como la verdad, es imaginariamente simbólica, no siempre la verdad, no siempre la poesía despierta. Algo de esto retornó hoy en las palabras de Juarroz: la poesía apunta al despertar, decía. Bien, nosotros sabemos cuál es el despertar que nos interesa, ese despertar que es uno de los nombres de lo real en tanto imposible. Pero Lacan indica que no siempre la poesía despierta, no siempre la verdad despierta. A la pregunta por si la verdad despierta o adormece, responde que eso depende del tono con el que es dicha. 
¿Qué puede aportar el arte, el saber-hacer del artista, a este otro saber-hacer que es el nuestro? Un saber-hacer que si extingue el síntoma por la interpretación, especifica a la verdad como poética. Me parece que aquí hay un sesgo novedoso: la verdad no es solamente revelación, que era su consideración clásica, no es solamente aletheia; la verdad... 
Ya en su seminario Du semblant... Lacan había afirmado que la interpretación no revela la verdad, sino que la desencadena. Ahora, en L’insu..., agrega que la verdad no se reduce a su costado de revelación, de des-ocultamiento. La verdad implica consecuencias, y por eso, porque es más del registro del saber-hacer, implica una técnica.

Propuesta psico-educativa “Laboratorio de sentimientos” (Grupos de reflexión y ayuda mutua en torno a emociones y preguntas existenciales)

-Basamentos psicológicos de los grupos de reflexión
En muchas oportunidades y por diferentes motivos las personas nos encontramos frente a lo que la filosofía y la psicología llaman “preguntas existenciales”.
Son planteos relacionados con el sentido de la vida, la muerte propia o de seres queridos, el amor y las relaciones humanas en general. No necesariamente todas las personas se hacen este tipo de planteos todo el tiempo, pero en determinados momentos puede ser que nos enfrentemos con ellas. El nacimiento de un hijo, una enfermedad, una ruptura en una relación o algún tipo de decisión o de cambio de importancia puede hacer que nos lleve a preguntarnos estas cuestiones trascendentales y profundas, que solo encuentran una respuesta enriquecedora si se amalgaman con los sentimientos y emociones de las personas.
Algunos analizan estos temas sin desencadenar angustia ni ansiedad, simplemente lo hacen parte de sus búsquedas individuales en la vida y las van respondiendo a lo largo del tiempo. Otras personas puede ser que se sientan angustiadas y que requieran de un grupo de contención y la guía de un profesional. Para ambos grupos va dirigida esta propuesta.

Las palabras elegidas para dar inicio a esta propuesta reflejan el estado de búsqueda de quiénes acuden a estas sesiones de trabajo grupal.
No es exacto calificar de “terapéuticas” estas reuniones de grupo ya que acuden a ellas muchas personas que no padecen trastorno alguno. En ese sentido, muy bien podrían considerarse “educativas” en tanto cada persona aprende a construirse a sí misma un nuevo estado de identidad personal.
En las sociedades actuales el “yo pienso” predomina sobre el “yo siento” y las preguntas existenciales no encuentran respuestas constructivas o directamente no tienen espacio para emerger.
En este “laboratorio de sentimientos” el participante podrá encontrarse consigo mismo, expresarse libremente y relacionarse con los otros afrontando los miedos y afirmando sus expectativas más profundas.
El individuo puede aprender (al menos atisbar) cuál es la actitud positiva que le ha acercado a sí mismo y a los otros. En el encuentro con la vida cotidiana podrá seguir profundizando su crecimiento ya que los encuentros grupales son solo una ínfima parte de la existencia de la persona y no actúan mágicamente sin el esfuerzo diario de la persona por, finalmente, encontrarse consigo misma.

-¿A quienes está dirigida la propuesta?
Adolescentes mayores de 18 años y adultos en general de ambos sexos.

-¿Cómo se llevan adelante los encuentros?
Se realizan una vez por semana y tienen una duración de 90 minutos

-¿Qué técnicas se utilizan?
Se utilizan recursos artísticos como medio para movilizar y canalizar los sentimientos

-¿A qué se compromete cada participante?
A asistir a las sesiones consciente de sus limitaciones y respetando profundamente a sus compañeros en tanto personas en igualdad de condiciones que sí mismo mas allá de la problemática individual que cada uno plantease.
A acentuar la sinceridad respecto a las emociones y los sentimientos vividos y expresados. Es necesaria una gran honestidad por parte de todos los miembros del grupo.

La lectura, alimento del alma

“Ética y Psicoanálisis” Por Erich Fromm

Un espíritu de orgullo y de optimismo distinguió a la cultura de Occidente durante las últimas centurias: 
orgullo en la razón como el instrumento del hombre para el entendimiento y el dominio de la naturaleza
optimismo por el logro de las esperanzas más queridas de la humanidad, la obtención de la mayor felicidad para el mayor número de individuos. (…)
El hombre moderno, sin embargo, se siente inquieto y cada vez más perplejo. Trabaja y lucha, pero es vagamente consciente de un sentimiento de futilidad con respecto a sus actividades. Mientras se acrecienta su poder sobre la materia se siente impotente en su vida individual y en la sociedad. Conforme ha ido creando nuevos y mejores medios para dominar a la naturaleza se ha ido enredando en las mallas de esos medios y ha perdido la visión del único fin que les da significado: el hombre mismo. Ha llegado a ser el amo de la naturaleza y al mismo tiempo se ha transformado en el esclavo de la máquina que construyó con su propia mano.
A pesar de todos sus conocimientos acerca de la naturaleza, permanece ignorante en cuanto a los problemas más importantes y fundamentales de la existencia humana: lo que el hombre es, cómo debe vivir, y cómo liberar las tremendas energías que existen dentro de él y usarlas productivamente.

EL CONCEPTO DE ENCUENTRO (TELE Y TRANSFERENCIA)

Según  Moreno  “la  transferencia  es  el  desarrollo  de  fantasías  (inconscientes)  que  el  paciente proyecta  sobre  el  terapeuta,  ot...